La Ruta de la Pedra en Sec hace referencia al método de construcción (sin ningún tipo de cemento o argamasa) de caminos, muros y taludes que los árabes introdujeron en la Baleares.
A lo largo de más de 100 km, el GR 221 propone descubrir los paisajes de piedra seca de la Serra de Tramuntana, hoy declarada Patrimonio Mundial de la UNESCO. Asimismo, permite visitar interesantes vestigios históricos, encontrarse con mitos y leyendas, y conocer las tradiciones, la arquitectura, las costumbres, la gastronomía y la artesanía de este lugar privilegiado de la geografía isleña.
El itinerario se acerca a menudo a la costa y en algunos tramos a las cimas más elevadas de la sierra, siendo el punto más alto del recorrido el Coll de ses Cases de Neu (junto al Puig de Massanella), con poco más de 1.200 metros de altura. Esta combinación y la diversidad de vegetación, con densos encinares y monte bajo típicamente mediterráneo, contribuyen a incrementar el interés paisajístico de la travesía.
La ruta se sustenta principalmente en la red de antiguos caminos restaurados por el Consell de Mallorca, la cual gracias a la climatología de la isla es practicable la mayor parte del año.
No cabe duda que la Primavera es la época ideal para afrontar la travesía de la Tramontana, y poder hacerlo en Semana Santa un privilegio por la dificultad que entraña reservar los refugios. Los largos días y las temperaturas suaves nos ayudarán y harán más agradable la superación del reto que implica recorrer la sierra de la Tramontana en cinco jornadas.
Vuelo al aeropuerto de Palma. En el aeropuerto cogeremos el bus público a la Estación Intermodal de Palma. Desde allí parte el bus de línea a la población de Valldemosa, donde comenzaremos nuestra travesía de la Tramontana.
Esta primera etapa del trekking conecta dos de los pueblos más bellos de la isla a través de los famosos caminos del Archiduque. El Archiduque Luis Salvador fue un enamorado de la isla que hizo construir numerosos caminos y miradores, algunos de los cuales conoceremos en la etapa de hoy.
Antes de iniciar la etapa tendremos tiempo de visitar brevemente Valldemosa.
Hoy vamos a hacer un recorrido alternativo al GR221, pues de seguir el trazado usual, la etapa entre Deià y el Puerto de Soller se quedaría demasiado corta. Se trata de una opción aventurera y de altos vuelos, que supera de forma muy directa los farallones que rodean Deiá a través del Pas des Racó, que está equipado con un cable. Posteriormente, ya encaramados en la cuerda disfrutaremos de unas sobrecogedoras vistas de la costa y del valle de Soller desde el Pic des Vent, antes de descender al encuentro del GR221, que nos llevará al refugio de Muleta junto al Puerto de Soller.
Etapa reina del trekking, tanto por distancia como por desnivel acumulado y que tiene como puntos fuertes el Valle de Sóller y todo su arco montañoso y el ascenso por el Barranco de Biniaraix hacia el Embalse de Cúber. La ruta finaliza con el desenso del angosto Torrent de l'Almadrà hasta el refugio de Tossals Verds.
Tras el esfuerzo de ayer hoy tenemos una ruta algo más relajada si se descarta la ascensión al Puig de Massanella (segunda cima de Mallorca tras el Puig Major) que es opcional. Esta ascensión se realizará si hay buenas condiciones climatológicas y todo el grupo está en disposición de afrontarla.
Se haga o no la cima del Massanella, nos encontramos ante una de las etapas más bellas, que atraviesa el núcleo más elevado de la Tramontana tras el Puig Major, inaccesible por estar ocupado por una base militar. La etapa finaliza en el precioso Monasterio de Lluc, en cuyos terrenos se encuentra el refugio de Son Amer.
Nuestra última etapa es un agradable recorrido en el que bordearemos el Puig Tomir, la última de las grandes montañas de la Tramontana, para después descender hacia la bella localidad de Pollença, en la que entraremos por su precioso puente románico.
Tendremos tiempo para comer y visitar la población hasta la hora en que tengamos que coger el bus a Palma. Una vez en la Estación Intermodal de Palma tomaremos el bus al aropuerto.