En las excursiones de cualquier nivel es obligatorio llevar ropa de abrigo además de calzado de montaña.
Las particulares condiciones climáticas de la ladera norte del puerto de Canencia han permitido la conservación de un abedular de características nórdicas, superviviente de épocas más frías en la Península. Una senda ecológica nos permitirá observar y reconocer el abedul y otras especies que conviven con él, como el tejo, el serbal de cazadores, el acebo, el roble de montaña, el fresno... sin olvidar el pino silvestre, que se extiende por hectáreas y brinda al senderista un entorno de armonía con su tronco anaranjado y sus altas copas que dejan pasar la luz para enriquecer el bosque.