Este trekking con orígen en el valle francés de Arrens es una combinación del famoso trekking de los 3.000 ibones y parte de la clásica vuelta al macizo del Vignemale. En concreto, se centra en su parte oriental y transita entre los macizos del Balaitus, los Infiernos y el Vignemale. Durante buena parte del recorrido por la vertiente española seguiremos la Senda Pirenaica GR 11, mientras que en la vertiente francesa, el trazado de la Alta Ruta Pirenaica (HRP) guiará nuestros pasos.
Decenas de ibones (lagos glaciares) nos saldrán al paso, en un auténtico ambiente de alta montaña en el que no faltarán neveros, pedreras, ríos, bravos torrentes, apacibles praderas...y todos los elementos que hacen de este trekking pirenaico una maravillosa aventura.
Desde las inmediaciones de Arrens Marsasus, al sur de Lourdes, comenzaremos este trekking que nos llevará al refugio de Larribet, a los pies del Balaitus. Atravesaremos collados famosos como los de la Piedra de San Martín, Los Infiernos o el Puerto de Los Mulos para para poder llegar a lugares imprescindibles de la alta montaña pirenaica como son los Circos Glaciares de Respomuso y Bachimaña, los valles del Ara y Gaube o el Circo de Gavarnie. cruzando hacia territorio francés para poder pernoctar al abrigo del coloso macizo del Vignemale, completando así una inédita y magnífica travesía siguiendo tramos del GR 11 y la HRP.
Este corto trekking en época estival permite no cargar con mucho peso, pues serán tres jornadas de pernocta en los refugios franceses de Larribet y Oulettes de Gaube, así como en el de Bachimaña del lado español. Carece de dificultades técnicas aunque las etapas son largas y con desniveles importantes, por lo que habrá que madrugar para completar los recorridos. El primer y último día del viaje estaremos alojados junto a los grupos de senderimso en el hotel de Lourdes.
Viaje a Lourdes por Irún (640 km; autovía hasta Pau). Antes de acomodarnos en nuestro hotel y conocer este peculiar centro de peregrinación, en función del tiempo disponible dispondremos de la tarde libre para conocer esta emblemática población.
Una pequeña carretera que parte de Arrens-Marsous nos introducirá en este precioso y recóndito enclave del Pirineo francés, donde comenzaremos este trekking, siguiendo el valle que está delimitado al Sur por la imponente barrera del macizo del Balaitús, el gran coloso pirenaico al pie del cuál se cobija el refugio de Larribet, donde pernoctaremos.
Hoy bordearemos el macizo del Balitús en esta etapa larga pero sin complicaciones, para pasar al lado español a través del puerto de la Pierre de Saint Martín y acceder así al Circo de Respomuso. Saldrán a nuestro paso los Ibones de Llena Cantal o Tebarray, a medida que superamos el Cuello del Infierno que da paso al espléndido Circo de Bachimaña y sus innumerables Ibones, descendiendo después al valle de Panticosa.
Al contrario que nuestra ruta del día anterior, transitada y conocida, la de hoy es muy poco frecuentada, lo que la otorga más belleza aún. A través de los embalses de Bramatuero, el collado de Letrero y los Ibones de Batanes, y con senderos poco marcados en algunos tramos, llegaremos a la cabecera del Valle de Ara a los pies del imponente macizo del Vignemale. El famoso puerto de los Mulos nos permitirá llegar al refugio de Oulettes.
La última etapa de nuestra travesía por este rincón del Pirineo francés asciende primero al refugio de Baissellance bordeando el impresionante glaciar de la cara norte del Vignemale antes de realizar un largo descenso a través del valle "Gave de Ossue" que desemboca junto al famoso Circo de Gavarnie, donde nos esperan nuestros compañeros del grupo de senderismo para regresar al hotel.
El panorama más bello de los Pirineos desde Lourdes. El Pico del Jer, que domina la ciudad, se reconoce por su gran cruz iluminada de noche, pudiendo acceder a él con un funicular centenario que lleva hasta la cima a casi 1000 metros de altitud en unos minutos o por el contrario realizar este recorrido senderista con encanto siguiendo senderos bordeados de píceas, de pinos y de boles rocosas recordando la clase calcárea del macizo. Tras la excursión emprenderemos el viaje de regreso a Madrid.