A caballo entre las provincias de León y Asturias, en uno de los entornos mejor conservados de la Cordillera Cantábrica, los bosques de Redes y Aller (Asturias) albergan una de las masas boscosas de mayor riqueza de la Península Ibérica, donde Osos, lobos y Urogallos encuentran cobijo todo el año. Destacan cumbres como el el Tiatordos y la Rapainal, la máxima altitud del parque con 2.002 m. La acción de los ríos ha dado lugar a la aparición de valles abiertos que forman grandes vegas en sus fondos o a los impresionantes desfiladeros de roca caliza, como el del río Pino o el de los Arrudos, principales destinos de los amantes del senderismo. En este viaje disfrutaremos de los bien conservados bosques de la Montaña Central Asturiana y de los múltiples desfiladeros que caracterizan la zona.
Si algo caracteriza el paisaje asturiano de Redes son los magníficos bosques maduros que cubren casi la mitad de su escarpada superficie y los numerosos arroyos y ríos que corren por el interior de bellos desfiladeros, que convierten al Parque Natural de Redes en el manantial del Principado a la vez que en el territorio más arbolado de Asturias.
La riqueza ambiental de Redes se manifiesta en una multitud de paisajes y contrastes, pudiéndose observar formaciones de origen glaciar, formas kársticas en cuevas y lapiaces, amplios campos de pasto, montes y frondosas masas boscosas. Todo ello ha dado lugar a que el Parque Natural de Redes fuera catalogado como Reserva Natural de la Biosfera.
Situada en el centro sur de Asturias, las Montañas de Aller es una comarca asturiana llamada también “La Puerta de Asturias” por ser la entrada al principado desde la Meseta. Alberga frondosos bosques, solitarias brañas ganaderas, verdes praderías de montaña y hermosos desfiladeros, a la vez que acoge a especies en peligro de extinción como el oso pardo y el urogallo.
Durante el viaje conoceremos lugares poco frecuentados como Peña Melera, , que sobresale sobre un magnífico hayedo, las Foces del río Pino y la Ruta Allerana de las Brañas, una de las más clásicas del Principado. Este recorrido atraviesa mullidas campas, donde aguardan rudimentarias cabañas pastoriles que aún hoy sirven de cobijo para los vaqueiros cuando el ganado aprovecha los pastos tardíos en época estival.
Viaje a la población allerana de Felechosa (450 km) donde nos alojaremos durante el viaje.
Las rutas que vamos a realizar hoy son de esas difíciles de olvidar, ya que conoceremos dos de los rincones más especiales de la Montaña Central Asturiana. Por un lado el Nivel A completará una de las rutas estrella del Principado, la conocida como Ruta Allerana de les Brañes, atravesando suaves praderíos en los que irán apareciendo las cabañas de pastores que todavía cobijan a los vaqueiros que en los meses más cálidos suben su ganado a estos fértiles pastos y bucólicos paisajes otoñales. Mientras tanto la excursión propuesta para el nivel B, la ascensión a Peña Melera, nos llevará por uno de los parajes más bonitos y solitarios de Asturias: las Foces del río Pino y las montañas de Fuentes de Invierno.
Hoy caminaremos por uno de los barrancos fluviales más salvajes de Asturias, el desfiladero de los Arrudos, un angosto paso tajado por las aguas del río Caleao en su precipitado descenso hacia el Nalón. Agua, bosque y roca son los tres elementos que mejor definen la naturaleza de la montaña asturiana, y los tres se dan cita en estas dos rutas que se adentran por las solitarias y agrestes montañas del concejo de Caso, uno de los rincones de orografía más accidentada de todo el Principado. Mientras el grupo de nivel A recorrerá el desfiladero y llegará hasta el hayedo donde está el manantial desde donde corren las aguas de los Arrudos, El grupo de nivel B completará una magnífica travesía por las solitarias montañas de Aller para descender por el Desfiladero de los Arrudos hasta la población de Caleao (PN Redes).
Terminamos nuestro viaje por Asturias disfrutando de los lugares más fotografiados de la Montaña Central Asturiana. El Grupo de nivel A recorrerá las Foces del Río Pino, mientras que el Grupo de NIvel B ascenderá hasta la base de Peña Mea, donde se encuentra la famosa ventana rocosa, con un diámetros de más de 20 metros, conocida como Ojo de Buey, y que debe su forma a la constante erosión cárstica en la roca caliza. Tras las excursiones emprenderemos el viaje de regreso.