La Costa Vasca puede presumir de albergar una naturaleza bien conservada además de poseer alguno de los pueblos marineros más bonitos de la costa cantábra, todo ello se incluye en el Geoparque de la Costa Vasca en el cual nos centraremos. Entre Donostia y Mutriku, se suceden una serie de acantilados, calas y sierras litorales que poseen una belleza singular. En nuestro viaje podremos disfrutar de la singular belleza de pueblos marineros como Deva o Zumaia, pasear por los hayedos de Aránzazu, internarnos en el Valle de Lastur, conocer el Flysch de Zumaia, disfrutar de magníficos miradores de la Costa Vasca, así como ascender a algunos de los Montes más emblemáticos de la Montaña Guipuzcoana
De Getaria era Juan Sebastián Elcano, el primero que dio la vuelta al mundo, y de Zumárraga, Legazpi, conquistador de Filipinas. Pero junto al marinero está el pueblo campesino. El caserío sigue siendo el eje de la vida campesina vasca. La agricultura, claramente minifundista, se basa en el cultivo intensivo por lo que el aprovechamiento de la tierra es total. El otro tradicional oficio vasco es el de pastor y, por lo general, eran propietarios de sus rebaños. Cuando no podía ser así, emigraban. Muchos de ellos fueron a Estados Unidos y Canadá. La importante industria por la que es hoy día conocido el País Vasco llegaría, junto al comercio, a principios del siglo XX.
En la provincia de Guipúzcoa se extiende la sierra de Aizkorri, que junto con Sierra de Aralar, une los Pirineos con la Cordillera Cantábrica. Entre sus montañas calcáreas tapizadas de hayas y robles se cobijan desde innumerables restos megalíticos, pasando por ermitas excavadas en la roca, hasta emblemáticos santuarios como el de Nª Sª de Aránzazu, patrona de la provincia.
La Sierra de Aralar es un gran macizo kárstico que se extiende entre Guipúzcoa y Navarra, y que alterna un paisaje caótico de lapiaces, cumbres piramidales, simas y cuevas, con otro más sereno de prados siempre verdes y hayedos de infinitos colores como el de Akatz-Sastarri. En esta ocasión nos centramos en esta elegante y atrevida montaña que es el Txindoki, un Cervino en miniatura a la medida de los paisajes vascos.
Situada en el Valle de Oria, Tolosa es una de las poblaciones con mayor valor histórico de Guipúzcoa, de la que fue incluso su capital. Se encuentra a media hora de San Sebastián y alberga uno de los mejores mercados de la provincia en el que se dan cita cada sábado agricultores y ganaderos de la zona, entre los productos destacan sobre todo el famoso queso de Idiazabal y los Xaxus, típicos dulces de la localidad.
Comenzamos nuestro viaje por la costa guipuzcoana ascendiendo al monte Adarra, con magníficas vistas sobre la Costa Vasca. A continuación nos desplazaremos hasta la población de Tolosa donde nos alojaremos.
La comarca del Alto Deba, en la zona más meridional de Guipúzcoa, alberga el recien declarado Parque Natural de la Sierra de Aizkorri, donde se concentran las mayores alturas del País Vasco. Los acusados contrastes de paisaje, que van de los agrestes barrancos presididos por el Santuario de Arantzazu, pasando por las deliciosas campas de Urbia, hasta los cresteríos de Aizkorri, nos sorprenderán sin duda.
Hoy vamos a disfrutar de uno de los más espectaculares tramos del litoral vasco. Entre las poblaciones marineras de Deva y Zumaia y a los piés de las montañas del Valle de Lastur, se suceden abruptos acantilados, tranquilas calas como las de Mendata, Aitzuri y Sakoneta y el famoso Flysch de Zumaia, una sucesión de terrenos estratificados en láminas formadas por materiales duros (arenisca y caliza), alternados con otros blandos como las arcillas y que quedan al descubierto en bajamar, siendo una de las imagénes más famosas de la Costa Vasca, con impresionantes vistas del litoral vasco, y que en días claros incluso permite alcanzar parte de la costa francesa de las Landas, para terminar igualmente junto al Flysch de Zumaia.
El Parque Natural de Aralar nos ofrece inmensos campos de lapiaces, sumideros, manantiales y cuevas, todo ello presidido por una de las montañas señeras de Guipúzcoa: el Txindoki, momntaña de aparente inaccesibilidad que le otorga su morfología, realizando la vuelta al mismo por Larraitz y el collado de Egural que ofrece unas excelentes panorámicas.
Completamos nuestro viaje por la costa guipuzcoana y sus sierras litorales ascendiendo al Monte Hernio (1.078 m), en el interior del Parque Natural de Pagoeta "donde abunda el haya" Este monte es uno de los míticos de Guipúzcoa, donde se acumulan multitud de cruces y aros en recuerdo de diferentes promesas y peticiones.Tras la ruta dispondremos de tiempo libre para visitar la pintoresca villa marinera de Mutriku hasta la hora de partir de regreso.