Paralelas a la costa Oeste de Norteamérica, una autentica pléyade de cordilleras forman este impresionante sistema montañoso que desde Nuevo México, parte en dos los Estados Unidos y se interna después en Canadá. En este país hace de frontera natural entre las descomunales provincias de Alberta y la Columbia Británica, finalizando sus relieves con los Montes Mackenzie en la mismísima Alaska.
El gran destino de nuestro viaje, al que dedicaremos siete días, es la zona de Lake Louise. Poco hay que decir de este centro de montaña cuyo orígen se remonta a la contrucción del Canadian Pacific Railway. Aquí finalizaba la línea y más allá no había sino naturaleza salvaje. El precioso Lago con su glaciar es una de las postales que todo visitante de Canadá retiene en su retina y nosotros tendremos el privilegio de realiar rutas con raquetas sobre su lecho nevado y helado, y de conocer todo su entorno que en primavera brilla de una manera especial.
Cercano a la ciudad olímpica de Calgary, el Parque Nacional de Banff fue el primer santuario oficial de la vida salvaje en Canadá. No en vano la imagen de las turquesas aguas del Lago Moraine es uno de los iconos del país y la ciudad de Banff su primer centro turístico. Banff será la puerta de entrada hacia los parques de Yoho y Jasper, situados más al norte y mucho más extensos e inexplorados.
Lagos rodeados de auténticas murallas montañosas, bosques inacabables, glaciares, ríos salvajes... ¿A quién no se le dispara la imaginación? Así son los paisajes de Alberta que han servido de escenario a pioneros, exploradores, buscavidas y otros personajes de un individualismo feroz. Una dualidad, hombre y paisaje, con la que Hollywood ha fabricado películas legendarias.
Traslado a un hotel cercano al aeropuerto. Recepción de los participantes.
Pronto por la mañana abandonaremos la ciudad y pondremos rumbo a las Rocky Mountains. Calgarly está situada a 1 hora escasa de Kananaksis Country, lugar donde empiezan las montañas.
El Kananaskis Country, pegado al Parque Nacional de Banff. Es menos conocida y mucho menos concurrida que los grandes parques vecinos. En la transición entre invierno y primavera, Kananaskis tiene un encanto especial: los bosques empiezan a despertar, las montañas siguen nevadas y el contraste entre hielo, agua y luz suave crea paisajes espectaculares sin apenas gente.
Chester Lake, en ese momento, es mágico, al llegar al lago puedes encontrar una mezcla única de hielo quebrándose, reflejos azules y picos nevados alrededor.
Lake Louise es un símbolo de la montaña Canadiense, un lago alpino de aguas cristalinas en el que se estableció uno de los hoteles de montaña más antiguos de Canadá, en 1.890, el Chateau Lake Rodeado de impresionantes picos glaciares, su nombre hace referencia a la Princesa Louise Caroline Alberta, hija de la Reina Victoria y esposa del entonces gobernador general de Canadá, el Marqués de Lorne. De hecho, la provincia de Alberta también lleva su nombre.
El Wapta Icefield es uno de los campos de hielo más impresionantes de las Montañas Rocosas canadienses. Se extiende a lo largo de la divisoria continental de aguas, entre los Parques Nacionales de Banff y Yoho, en la frontera entre Alberta y Columbia Británica.
Este vasto glaciar alimenta varios glaciares más pequeños, como el Bow Glacier y el Peyto Glacier, cuyas aguas dan origen a los emblemáticos lagos Bow y Peyto. El paisaje es sobrecogedor: un mundo blanco de hielo y roca rodeado de picos majestuosos, como el Mount Rhondda o el Mount Gordon.
El Wapta Icefield es también un destino clásico para el alpinismo y el esquí de travesía, ofreciendo travesías de varios días por refugios de montaña conectados entre sí.
Para hacer esta excursión recorreremos unos kilómetros de la Icefields Parkway que es la carretera que une Lake Louise con Jasper. Esta carretera es sin duda una de las más bonitas del mundo y eso se debe al paisaje que se puede observar desde la misma carretera. Enormes icefields (campos de hielo) vierten sus lenguas de hielo glaciar hasta preciosos lagos como el Peyto Lake y Bow Lake.
Muy cerca de la población de Banff, camino de la estación de esquí alpino de Sunshine Sky Area se encuentra un largo y profundo valle que recorreremos siguiendo el Healy Trail. Este Trail es la ruta de acceso para uno de los campamentos más famosos del Parque Banff el de Egipt Lake.
Yoho es el Parque Nacional más pequeño de los que vamos a visitar. Pertenece a la Columbia Británica, su nombre proviene del lenguaje Cree y significa “para asombro y maravilla” por eso es patrimonio de la humanidad y por supuesto no tiene nada que desmerecer a sus vecinos parques de Banff y Cotenay. Tras rodear este precioso lago ascenderemos hasta el Yoho Pass para disfrutar de la panorámica que ofrece.
Hoy nos desplazaremos hasta el Parque Nacional de Jasper para hacer una ruta por el Columbia Icefield, el más grande campo de hielo que hay en todo Canada y de hecho en toda Norteamérica, rodeado por once grandes picos y formado por seis glaciares de los cuales el más conocido es el Athabasca Glacier. Trataremos de alcazar el Wilcox Pass para disfrutar de este soberbio lugar.
Exploraremos caminando Johnston Canyon, un bonito cañón modelado por la fuerza erosiva del agua. En verano, el visitante disfruta de la sucesión de cascadas, pozas y el rugido del agua actuando sobre las paredes rocosas. En invierno y en primavera, el curso congelado genera impresionantes cascadas de hielo y el entorno más silencioso genera un ambiente mágico.
Camino de Calgary haremos visita a la población de Canmore, una de las más típicas poblaciones de las Rocosas.
Calgary, la ciudad más importante de Alberta y tercera de Canadá, está considerada como una de las mejores ciudades del mundo para vivir. Dependiendo del horario del vuelo de regreso, podrás visitar unas horas la ciudad.