Partiremos de Laupstad por terreno cómodo hasta alcanzar un collado de grandes dimensiones que separa la cumbre del Sautinden con el Pilan, que es otra cima clásica de la zona, principalmente por los esquiadores de montaña.
Viraremos nuestro rumbo hacia el este y ascenderemos por una amplia pala hasta la cumbre del Sautinden. Desde la cima tendemos nuestra primera gran vista de la semana, la cual no dejará indiferente a nadie.
El descenso lo haremos hasta el gran collado y desde aquí nos desviaremos al suroeste en busca de unos bonitos lagos de montaña en las faldas del Pilan (826 m) si las condiciones son las propicias.
Partiremos de Sørvågen en dirección norte por un camino que va recorriendo varios lagos de origen glaciar y que llega hasta el refugio Munkebu a los pies de la cima que da nombre a este refugio.
Una vez lleguemos al refugio podremos disfrutar de unas vistas espectaculares: el lago Tennes a nuestros pies, los lagos de Krok frente a nosotros, salpicados de cascadas, y el imponente monte Hermannsdaltinden. (1029 m), el pico más alto de la isla de Moskenesøya. A la derecha se elevan las cumbres del monte Munken y Tennestinden, que se alzan unos 700 metros sobre el fiordo Fors. Sin duda, un lugar que deja huella.
Partiremos desde el nivel del mar, en la confluencia del lago Vatterfjordpollen con el mar. Bordearemos el lago en sentido contrario a las agujas del reloj y en la orilla noroeste empezaremos a ganar altura por un cordal que deja a mano izquierda un pequeño valle salpicado de ibones de montaña.
Llegaremos a un terreno con una menor pendiente, ideal para reponer energías, que precederá a la parte final de la ascensión con una pendiente más acusada. Alcanzaremos el cordal sur-suroeste que será la llave de acceso al Rundfjellet. Realmente nos quedaremos en una cumbre satélite, algo inferior a la cumbre principal que es el lugar accesible para llegar en este viaje ya que la cumbre principal tiene pasos expuestos.
Nuestra ruta comenzará en un pequeño aparcamiento junto al fiordo Torsfjorden. Desde allí, seguiremos un camino sencillo que nos llevará al paso de Skores, desde donde se puede ascender a los picos de Torsfjorden o al famoso Moltinden (651 m).
Mientras caminamos, a nuestras espaldas queda el tranquilo fiordo Torsfjorden, y frente a nosotros aparece la hermosa bahía de Kvalvika, con sus arenas blancas y rodeada por los impresionantes acantilados verdes de Ryten, Moltinden y Kjerringa.
Recorreremos la playa de Kvalvika hasta el otro extremo, donde parte un sendero que nos llevará junto a una serie de lagos hasta el fiordo Self, donde finalizaremos la ruta, tras realizar un bonito itinerario circular.
Si las condiciones son buenas tendemos la opción de ascender al Ryten. que se encuentra sobre un gran acantilado de más de 500 m sobre el nivel del mar. En este caso, el descenso lo realizaremos por una pala amplia, dirección sureste, hasta alcanzar de nuevo el punto de partida completando un interesante recorrido circular.
Partiendo desde el aparcamiento de Hagstua, emprenderemos el ascenso por un espolón hasta una serie de lagos, que en condiciones normales estarán completamente congelados. Alcanzaremos el collado bajo la falda del primer pico de la jornada, el Steindalstinden 464 m.
Continuando por la divisoria de aguas, descenderemos unos metros sobre la cuenca del lago Kringbotnsvatnet y emprenderemos de nuevo el ascenso al Kartstaven de 544 m.
Las vistas sobre las bahías y fiordos de esta zona son espectaculares, con tonalidades diferentes en sus aguas y salpicados de pequeñas casitas.
En el descenso atravesaremos si las condiciones son propicias el Kringbotnsvatnet para seguidamente ganar unos metros y atravesar una serie de lagos y conectar de nuevo con el itinerario de subida de la primera parte.
De la población de Svolvaer recorreremos un lago hacia la cabecera del mismo. Esta primera parte es ideal como calentamiento ya que prácticamente es llano.
En la cabecera del lago parte un camino ya con más pendiente que nos permitirá ganar metros y alcanzar el lago Nøkkvatnet (249 m). Junto al lago encontramos el refugio Nøkksaetra con una bonita terraza que nos invitará a realizar nuestro primer almuerzo en montaña y además podremos remar con un pequeño bote que se encuentra en la orilla. Los menos activos podrán descansar y disfrutar del entorno.
Posteriormente ganaremos otros 100 metros de desnivel positivo para salvar un cordal y ya en claro descenso alcanzar el lago Stornøkkvanent (240 m). A vista de pájaro veremos Svolvaer y las montañas que rodean a esta población.